La partida

Una vez más, una de mis locas ideas me lleva a cambiar todo: trabajo, casa, país, idioma... no es la primera vez, me animé porque ya sabia de que se trataba. La diferencia ahora es que tengo dos hijos pequeños y mil cosas, es increíble como te atas a la vida con responsabilidades y objetos.

El proceso a sido muy difícil, el deshacerse de las cosas, planear todo el movimiento, con tantos y tantos pendientes, tramites y papeleo que no se le veia fin. Es cerrar una vida entera para poder abrir otra. En el camino noté como personas muy cercanas, y otras no tanto, nos tienen un cariño mayor que el que yo imaginaba, eso lo hizo sin duda mas significativo, importante y también mucho más doloroso.

Antes de seguir debo reconocer el incondicional y extraordinario apoyo que mi esposa me ha siempre dado, este cambio será fabuloso para todos, pero se requiere de una gran compañera de vida para que se anime a aventarse el paquetito.

La primera gran muestra de cariño colectivo fue una noche en el pub Clap, donde sin saber cuanta gente llegaría aparecieron en gran numero y casi se me salen las lagrimas. La segunda fue con mis alumnos, en mi última clase del último dia que pasaría yo en mi ciudad me sorprendieron con un pastel y muchos buenos deseos, pueden ver algunas fotos aquí.

El lugar donde vives y la gente con la que te relacionas es evidentemente uno de los factores que te hace como persona, cada uno de mis alumnos, de mis colegas y amigos me han dejado un cachito suyo y con mucho orgullo y cariño me lo llevo, la intencion de mantener este blog no es solo para publicar cosas intersantes que me encuentro, ahora se convierte también en una importante manera de mantenerme cerca de la gente que estimo.

Muchísimas gracias a todos.